Skip to main content

 

La blancorexia es un término desconocido para muchos, por no decir para la mayoría de las personas. Se trata de una patología que cada vez preocupa a más dentistas, y que se da en personas que tienen obsesión por los dientes blancos,  que sean cada vez más y más blancos, hasta el punto de poner en riesgo la salud de las propias piezas dentales.

Como decíamos, el número de dentistas preocupados por esta circunstancia va en aumento. El problema radica en que las personas que sufren este problema, nunca tienen suficiente y toman medidas para realizar este tratamiento al margen de los profesionales sanitarios; medidas que pueden llegar a resultar muy perjudiciales. Ante la respuesta por parte de un profesional de que ya no es recomendable proceder a un nuevo blanqueamiento, estas personas no aceptan un no por respuesta, y buscan alternativas al margen de la sanidad. Deben saber que si toman este camino, el final del mismo puede ser la muerte de algún diente.

Blancorexia bajo control

blancorexia dientes blancosEs fundamental recordar que sólo los profesionales pueden ser las personas responsables de realizar este tratamiento, ya que para ello se usan productos que únicamente deben emplearse bajo supervisión de un ojo experto. Además, el profesional es quién debe indicar qué tratamiento concreto aplicar, en función de las características del paciente, ya que además no todas las personas pueden someterse a un blanqueamiento.

Más allá de que pueda parecer un problema frívolo o insignificante, la blancorexia puede acarrear graves problemas de salud dental para aquellas personas que hacen caso omiso de las recomendaciones de los profesionales y buscan a toda costa un blanco cegador. De no ser así, podemos dañar a nuestras encías o a nuestro esmalte gravemente, o incluso terminar perdiendo algún diente, como antes apuntábamos. Bajo control de un dentista o de un profesional de la estética dental, estos tratamientos para nada son peligrosos, pero fuera de éste ámbito, el margen de la seguridad desaparece por completo.

Además, debemos meternos en la cabeza que el color de nuestros dientes no es blanco, sino más bien marfil. No podemos tomar como referencia a las famosas que aparecen en las revistas, ya que muchas veces las sonrisas que vemos en ellas son más producto del Photoshop que de la realidad. Los cánones de belleza actuales son muy cuestionables sobre todo a nivel de salud. Hay que romper una lanza a favor de la naturalidad y la sonrisa no debe escapar a ello. Las sonrisas más bonitas son las que presentan un color natural, así que destierra de tu mente la enfermiza blancorexia.

Consejos para unos dientes blancos y saludables

Debemos ser conscientes también que en nuestro día a día podemos aplicarnos nosotros mismos consejos para que nuestros dientes presenten un mejor aspecto. Para ello es básico e imprescindible un correcto cepillado de los dientes día tras día. Asimismo, debemos prescindir al máximo posible de productos como el café, el vino tinto o las bebidas carbonatadas, así como del tabaco. Son sin duda, para ciertas personas, importantes sacrificios, pero que ayudarán a que tengamos una mejor salud bucal.

Como hemos apuntado a lo largo de este artículo, el problema no es el tratamiento, sino abusar de ello en pos de un objetivo perjudicial. Si el blanqueamiento dental se realiza bajo la supervisión de un profesional y bajo sus pautas, no existe ni el más mínimo riesgo para la salud de nuestra boca. En Clínica Curull somos expertos en estética dental, con más de 20 años de experiencia, y somos expertos en el blanqueamiento dental. Si tienes la intención de realizar este tratamiento, acude a profesionales como nosotros y deja tu boca en buenas manos.

Leave a Reply